La buena disposición de un niño para la escuela depende de más básico de todos los conocimientos, de cómo aprender.
Siete son los ingredientes de esta capacidad crucial, todos ellos elementos centrales y pilares que soportan la inteligencia emocional.
1. confianza: la sensación de controlar y dominar el propio cuerpo, la sensación y el mundo; la sensación del niño de que lo más probable es que no fracase en lo que se propone, y de que los adultos serán amables.
2. Curiosidad: La sensación de que descubrir cosas es algo positivo y que representa evidente placer.
3.Intencionalidad: El deseo y la capacidad de producir un impacto y de actuar al respecto con persistencia.
4. Autocontrol: Capacidad de modular y dominar las propias acciones de manera apropiada a su edad; una sensación de control interno.
5. Relación: La capacidad de comprometerse con otros, basada en la sensación de ser comprendido y de comprender a los demás.
6. Capacidad de comunicación: Deseo y capacidad de intercambiar verbalmente ideas , sentimientos y conceptos con los demás.
7. Cooperación: La capacidad de equilibrar las propias necesidades con las de los demás en una actividad grupal.